¿Qué es una CBDC? Guía sencilla sobre las Monedas Digitales de los Bancos Centrales

Probablemente hayas visto el término CBDC rondando por las noticias o en tu feed de LinkedIn, pero ¿Qué significa y por qué debería interesarte?
CBDC son las siglas de Central Bank Digital Currency (Moneda Digital de Banco Central), y es un tema candente en las finanzas globales. Aunque pueda parecer algo reservado a economistas, las CBDC podrían transformar la forma en que empresas y particulares envían, reciben y almacenan dinero en un futuro cercano.
Gobiernos de todo el mundo, incluido instituciones de la UE, están explorando cómo las monedas digitales pueden modernizar los sistemas de pago, reducir la dependencia del efectivo y ofrecer a las personas un acceso más rápido y seguro al dinero. El euro digital ya está en marcha, y España está muy pendiente.
En esta guía aprenderás qué es una CBDC, en qué se diferencia de las criptomonedas y stablecoins, cuáles son sus ventajas y riesgos potenciales, y qué países están abriendo el camino. También verás cómo estos cambios pueden afectar a tu negocio, tus clientes y la economía en general.
Índice
- ¿Qué es una CBDC? (significado y definición)
- CBDC vs otros activos digitales
- Ventajas y riesgos de las CBDC
- Ejemplos de CBDCs en el mundo
- ¿Qué futuro les espera a las CBDCs en España y Europa?
¿Qué es una CBDC? (significado y definición)
Una CBDC es una versión digital de la moneda oficial de un país, emitida y respaldada por su banco central. Así, si España adoptase el euro digital, estaría gestionado por el Banco Central Europeo (BCE), y no por una empresa privada o un banco comercial.
Las monedas digitales de banco central son dinero digital respaldado por el gobierno, con el mismo valor que el efectivo físico o los euros de tu cuenta bancaria. Pero, en vez de billetes o monedas, existe únicamente de forma electrónica.
¿En qué se diferencia una CBDC del dinero de tu app bancaria?
Ya usamos dinero digital a diario, a través de tarjetas, transferencias, Bizum y otras apps de pago. Pero el dinero en tu cuenta lo emite un banco privado, mientras que las CBDC las emite directamente un banco central.
Eso significa que:
- No dependes de un banco privado para custodiar tus fondos. El gobierno es el emisor directo.
- Tu dinero es libre de riesgos. No existe el peligro de que tu banco quiebre y te quedes sin saldo.
- Es dinero de curso legal. Igual que el efectivo, una CBDC se aceptaría en todos lados (en teoría).
Puedes verlo como efectivo digital, con las mismas garantías y respaldo que el euro físico, pero pensado para un mundo digital.
¿Por qué los bancos centrales están interesados en las CBDC?
Los bancos centrales ven las CBDC como respuesta a lo rápido que está evolucionando el dinero. A medida que el uso del efectivo disminuye y los pagos son más digitales, los bancos centrales quieren:
- Modernizar su infraestructura financiera.
- Impulsar la inclusión financiera.
- Ofrecer una alternativa pública a las plataformas de pago digital privadas.
- Garantizar la autonomía monetaria, especialmente con el crecimiento de las cripto y stablecoins.
Además, las CBDC podrían mejorar los pagos internacionales, hacer las transacciones más rápidas y baratas, y reducir los costes de emisión y gestión de dinero físico.
¿Las CBDCs se basan en blockchain?
A veces sí, pero no siempre.
Algunos bancos centrales experimentan con blockchain o tecnología de registro distribuido (DLT)—una red descentralizada de ordenadores donde cada uno tiene una copia del registro—, mientras que otros usan bases de datos tradicionales. La tecnología depende del país, los objetivos del proyecto y el alcance de la implantación.
Lo más importante es la confianza, no la tecnología. Las CBDC deben ser estables, seguras y contar con el respaldo total del gobierno emisor. Si eso se logra con blockchain u otro sistema es secundario, siempre que funcione bien para las personas que lo usarán.
CBDC vs otros activos digitales
Las CBDC a menudo se asimilan a conceptos como los de criptomonedas, stablecoins y otros tipos de dinero digital. Aunque puedan parecer similares, en realidad son muy distintas en cuanto a finalidad, estabilidad y quién está detrás.
CBDC vs criptomoneda
Las criptomonedas como Bitcoin o Ethereum son descentralizadas, es decir, no están controladas por ningún gobierno ni autoridad central. Esa es parte de su atractivo: sus usuarios pueden operar entre sí sin bancos ni intermediarios.
Las CBDC son lo contrario: están centralizadas, las emite y regula el banco central de un país. Su objetivo es ofrecer las ventajas del dinero digital, como transferencias rápidas y acceso sencillo, pero sin la volatilidad o incertidumbre regulatoria de las criptomonedas.
Las principales diferencias:
- Emisor. Las CBDCs las emiten bancos centrales; las criptomonedas no.
- Estabilidad. Las CBDCs están vinculadas 1:1 a monedas nacionales; las criptos fluctúan mucho en valor.
- Curso legal. Las CBDC serían moneda oficial reconocida; la mayoría de criptos, no.
Así que, aunque ambas son digitales, una CBDC es básicamente dinero electrónico, mientras que una criptomoneda es más bien un activo especulativo.
CBDC vs stablecoin
Las stablecoins buscan ser un puente entre cripto y el dinero tradicional. Están ligadas a una moneda fiduciaria (como el dólar o el euro) y su valor debería mantenerse estable.
Normalmente las emiten empresas privadas, no gobiernos, así que tienen riesgo (¿qué pasa si la empresa detrás de la stablecoin quiebra?) y suelen carecer de transparencia total sobre sus reservas.
Una CBDC, en cambio, no depende de un tercero, la garantiza el banco central y cuenta con respaldo legal y regulatorio claro. Por lo general, las CBDC son más fiables y menos arriesgadas que una stablecoin privada.
CBDC vs dinero programable
"Dinero programable" es un término más reciente que se refiere a dinero digital con reglas automáticas, por ejemplo, un bono que solo puedes gastar en ciertos productos o que caduca tras un periodo.
Técnicamente, esto podría aplicarse a una CBDC, una stablecoin o incluso una cripto, según cómo se diseñen.
No todas las CBDCs son programables, pero algunos gobiernos estudian la idea. Por ejemplo, un banco central podría emitir ayudas que solo se gastan en bienes esenciales o caducan a los seis meses.
Es un tema controvertido, sobre todo por la privacidad y la libertad financiera, pero hay que entender que la programabilidad es una característica, no un tipo de dinero.
Ventajas y riesgos de las CBDC
Como cualquier innovación financiera, las monedas digitales de banco central tienen beneficios y posibles desventajas, según cómo se diseñen e implanten.
Ventajas para gobiernos
- Modernización de los pagos. Las CBDCs pueden hacer que los pagos nacionales e internacionales sean más rápidos, baratos y eficientes, sin intermediarios como SWIFT o redes de tarjetas. También ofrecen una alternativa segura al efectivo, sobre todo a medida que este cae en desuso.
- Más control monetario. Las CBDC pueden ser programables y rastreables, lo que da a los bancos centrales más visibilidad sobre el movimiento de dinero en la economía. Esto mejora las previsiones económicas y permite políticas monetarias más precisas.
- Menos dependencia del efectivo. Gestionar dinero físico es caro. Las CBDCs son un sustituto más seguro y de menor mantenimiento, especialmente ahora que el uso del efectivo disminuye.
- Mejor supervisión reguladora. Las CBDCs pueden ayudar a reducir fraudes y actividades ilícitas al proporcionar más trazabilidad a las autoridades.
Ventajas para empresas y particulares
- Pagos más rápidos y baratos. Imagina enviar o recibir dinero al instante, sin comisiones de terceros ni esperas bancarias. Las CBDC pueden hacer que las operaciones cotidianas sean más fluidas, especialmente para pequeños negocios y freelancers.
- Más seguro que el efectivo. Las CBDC las respalda el banco central, así que no arriesgas tus fondos ante la quiebra de un banco comercial o un fallo técnico.
- Mayor inclusión financiera. En teoría, las CBDC pueden facilitar el acceso al pago digital a más personas, si los bancos centrales desarrollan monederos móviles o colaboran con plataformas fintech.
- Transferencias internacionales sencillas. Los pagos entre países suelen ser lentos, caros y con muchos intermediarios. Las CBDC pueden facilitar mucho las transferencias internacionales, bajar costes y acelerar tiempos de liquidación—algo muy útil para negocios internacionales, autónomos que trabajan en remoto o personas que mandan dinero a otro país.
Posibles riesgos y desafíos
- Privacidad. Las CBDC son digitales y podrían ser programables, así que surgen dudas legítimas sobre vigilancia. ¿Podrá el gobierno ver todas las transacciones? ¿Cuánto control tendrá cada usuario sobre sus datos financieros?
- Impacto en los bancos. Si la gente traslada su dinero de cuentas bancarias a monederos CBDC, los bancos podrían tener problemas de liquidez. Los bancos centrales deberán diseñar las CBDC con cuidado para no desestabilizar el sistema financiero tradicional.
- Complejidad técnica. Crear una CBDC segura, escalable y fácil de usar no es sencillo. Fallos, caídas del sistema o ciberataques podrían dañar la confianza si la implantación no está bien gestionada.
- Adopción limitada. Como todos los métodos de pago nuevos, la gente necesita razones para cambiar. Sin un incentivo claro sobre las opciones actuales, las CBDC pueden tener difícil ganar usuarios, sobre todo en países con buenos sistemas bancarios digitales.
Ejemplos de CBDCs en el mundo
Las CBDCs ya se están probando, desarrollando o implementando en decenas de países. Aquí tienes algunos casos reales que muestran los distintos enfoques alrededor del mundo.
China: yuan digital (e-CNY)
China es uno de los países más avanzados en desarrollo de CBDCs. El Banco Popular de China lleva probando el yuan digital, también llamado e-CNY, desde 2020. Ya se utiliza en varias grandes ciudades y se integra con apps como Alipay y WeChat Pay.
Su objetivo es modernizar la infraestructura de pagos en China, reducir la dependencia de los gigantes tecnológicos y mantener el control monetario en una sociedad cada vez más sin efectivo.
Zona euro: euro digital
El Banco Central Europeo (BCE) está explorando actualmente el lanzamiento de un euro digital como complemento digital del efectivo. El proyecto sigue en fase de estudio y diseño, pero si se lanza podría ofrecer a ciudadanos y empresas de toda la eurozona una opción segura y ampliamente aceptada de pago digital, respaldada por el BCE.
España, al igual que otros países de la eurozona, participa activamente en esta exploración. MONEI fue una de las primeras fintech españolas en probar tokens digitales vinculados al euro (EURM) en un sandbox regulatorio supervisado por el Banco de España y el Tesoro.
Nigeria: eNaira
En 2021, Nigeria fue de los primeros países en lanzar oficialmente una CBDC. La eNaira se introdujo para promover la inclusión financiera, mejorar los pagos internacionales y reducir los costes de gestión de efectivo.
La adopción está siendo desigual, pero la experiencia temprana de Nigeria está sirviendo de referencia a otros países que lo siguen muy de cerca.
Bahamas: SandDollar
Bahamas lanzó el SandDollar, la primera CBDC plenamente operativa del mundo, en 2020. Su objetivo es mejorar el acceso a servicios financieros en las muchas islas del país, donde la banca tradicional es limitada.
El SandDollar lo emite el Banco Central de las Bahamas y ya lo aceptan comercios locales e integra monederos móviles.
Suecia: e-krona
Suecia es uno de los países con menor uso de efectivo del mundo, siendo un caso ideal para probar moneda digital. El Riksbank, el banco central sueco, está pilotando la e-krona para que el sistema de pagos del país siga siendo robusto e inclusivo ante el declive del efectivo.
¿Qué futuro les espera a las CBDCs en España y Europa?
Mientras que países como China y Nigeria ya han lanzado sus CBDCs, Europa sigue en fase exploratoria. Pero el proyecto avanza, especialmente con el euro digital.
En octubre de 2023, el Banco Central Europeo (BCE) puso en marcha la fase de preparación del euro digital. Se prevé que esta fase dure dos años, enfocada en perfeccionar el diseño de la moneda, probar la infraestructura y definir el marco regulatorio. Si todo va bien, el euro digital podría ponerse a disposición del público después de 2026.
El papel de España en el euro digital
España participa activamente en la configuración del euro digital. A principios de 2024, el Banco de España y la Secretaría General del Tesoro y Financiación Internacional supervisaron un sandbox regulatorio de cuatro meses para probar el uso real de tokens digitales vinculados al euro. Una de las compañías invitadas fue MONEI, que pilota una solución de pagos llamada EURM.
La prueba consistió en simular transferencias de euros empleando tokens digitales 1:1 en un entorno controlado. El objetivo era validar cómo se pueden emitir, transferir y canjear estos tokens sin depender de blockchains públicas ni intermediarios. Los resultados fueron prometedores y mostraron cómo las fintech pueden ayudar al banco central a desarrollar pagos modernos y seguros.
Por qué es importante
Si finalmente se lanza el euro digital, estará disponible en toda la eurozona, incluida España. Eso significa que empresas y ciudadanos dispondrán de una nueva forma de dinero público, pensada para la era digital, con pleno respaldo y aceptación universal.
Sin embargo, todavía hay muchas cosas que definir:
- ¿Cómo se protegerá la privacidad?
- ¿Tendrán que cambiar los bancos su manera de operar?
- ¿Qué incentivos hará falta para que la gente lo empiece a utilizar?
A medida que España y el BCE resuelven estas cuestiones, estar informado acerca de las CBDC puede ayudarte a entender hacia dónde va el futuro de los pagos digitales y cómo preparar tu negocio. Mantente a la vanguardia con MONEI.
Fuentes utilizadas:
- Forbes: A 2025 Overview Of The E-CNY, China’s Digital Yuan
- Central Bank of Nigeria: eNaira
- Central Bank of the Bahamas: Public Update on The Bahamas Digital Currency SandDollar
- Sveriges Riksbank: E-krona
- ECB: Eurosystem proceeds to next phase of digital euro project
- ECB: Timeline of the digital euro project

Alexis Damen
Alexis Damen es una ex-comerciante de Shopify convertida en experta del marketing de contenidos. Aquí, analiza temas complejos sobre pagos, comercio electrónico y ventas para ayudarte a tener éxito (con MONEI como tu socio de pagos, por supuesto).